El triunfo del 28-A, para Pedro Sánchez; la gran decepción, para Pablo Casado

  • El PSOE gana las elecciones del 28-A y casi dobla en votos al PP
  • Albert Rivera y Santiago Abascal, otros triunfadores de la noche. Pablo Iglesias, satisfecho a medias
Pedro Sánchez, en la celebración del PSOE en el 28-A
Pedro Sánchez, en la celebración del PSOE en el 28-A

El PSOE ha ganado las elecciones generales del 28-A. Suma 123 escaños con el 28,7% de los votos. El es primer y claro titular, aunque, por supuesto, no el único. Pedro Sánchez necesita pactos, como era de esperar, y aún depende de los independentistas catalanes para formar gobierno, ya sea con su apoyo o con su abstención. Todo si Albert Rivera y Ciudadanos no reculan en su veto. La otra cara de estas elecciones la representa Pablo Casado, que ha registrado para el PP sus peores resultados en unos comicios generales: 66 diputados con el 16,70% de los votos, muy lejos de los 137 obtenidos en 2016. Casi la mitad que el PSOE.

Los apoyos de los 'populares' han volado a Ciudadanos y Vox. La formación de Albert Rivera suma 57 escaños (15,85%), mientras la de Santiago Abascal hace historia al entrar en el Congreso por primera vez con 24 diputados (10,26%). Pablo Iglesias deja cierta estabilidad a Unidas Podemos, con 42 escaños frente a los 45 de hace tres años. El líder 'morado' no ha ocultado, eso sí, su decepción. Por cierto, participación muy alta, más del 75%, ocho puntos más que en 2016.

La fiesta en Ferraz iba en aumento según se iba conociendo el escrutinio de los votos. Las banderas ondeaban en la sede del PSOE en la calle Ferraz a la espera de la comparecencia de Pedro Sánchez, que salió ante su público a las 23.56 horas, acompañado de su equipo más cercano y entre gritos de "¡presidente, presidente!". Se rompió el protocolo, pues por primera vez el vencedor salió antes que sus dos principales rivales derrotados.

Necesita pactos. Se da la circunstancia que PSOE y Ciudadanos suman 180 escaños, superior a los 176 que dan la mayoría absoluta. Sería el pacto más sencillo, pero el veto que Albert Rivera ha mantenido contra el PSOE durante toda la campaña electoral hace que Sánchez tenga que buscarse los socios por otras vías. Los militantes socialistas reclamaban a Sánchez en la fiesta que no pactara con Rivera, aunque el líder del PSOE no lo descarta. Otra opción de pacto es Unidas Podemos, pero no es suficiente para lograr una mayoría. Podría sumar mayoría con el diputado de Compromís y los 15 de ERC. Por tanto, necesita los apoyos o la abstención de las formaciones independentistas para formar un gobierno.

De las sonrisas de Ferraz a la tristeza de Génova. La decepción en el Partido Popular ha sido muy grande en este 28-A, con unos resultados que nadie se esperaba en las filas 'populares'. El peor posible, nunca visto antes. Conscientes de la derrota, el exterior de la sede estaba casi desierto desde primera hora de la noche. Sin militantes, sin nada que celebrar. Mucho que reflexionar. El silencio se rompió justo a medianoche, intentando coincidir con Sánchez, y Pablo Casado reconoció que el resultado "había sido muy malo".

Un segundo ganador en estas elecciones ha sido Albert Rivera, que lleva a Ciudadanos a ser la tercera fuerza política en el Congreso con 57 diputados, tras obtener el 15,78% de los votos. Lejos quedan los 32 que obtuvo en 2016. Con 4,1 millones de votos, la formación naranja se queda muy cerca del PP, que apenas ha obtenido 4,3 millones de votos. Lejos el PP, lejísimos, de los casi 8 millones de votos de 2016. Rivera, de momento, promete "una oposición leal a la Constitución" y teme que Sánchez e Iglesias gobiernen con los independentistas.

En Unidas Podemos, satisfacción a medias. La formación morada pierde tres diputados: 42 ahora por los 45 de hace tres años. Pablo Iglesias, muy serio, ha reconocido que a Unidas Podemos le hubiera gustado "un resultado mejor, pero es suficiente para frenar a la dereha y a la extrema derecha y para crear un gobierno de coalición de izquierdas". "He transmitido (a Pedro Sánchez) que nuestra voluntad es trabajar juntos" y anuncia muchas reuniones a partir de ahora para "cumplir con el mandado que nos han dado los ciudadanos para trabajar en un gobierno de izquierdas". Iglesias ha hecho autocrítica y entiende que las crisis internas que ha sufrido Podemos en los últimos meses ha podido influir en los votantes.

La tercera gran sonrisa de la noche la tenía Santiago Abascal y su equipo de Vox. Con más de 2,6 millones de votos, Vox logra entrar en el Congreso por primera vez y lo hace con 24 escaños. "Quiero pediros que sigamos caminando juntos, por España. Veníamos, venimos y estamos por España, que es la herencia de nuestros padres y el futuro de nuestros hijos. Ahora habrá una voz en el Congreso que no había", dijo Abascal a los suyos en una noche histórica para Vox. El líder de la formación volvió a criticar a la "derechita cobarde" y su mala gestión con la "izquierda progre".

Otras formaciones

ERC se ha garantizado 15 representantes gracias al 3,86% de los votos, mientras que Junts per Catalunya consigue siete escaños y el 1,8%. El PNV, seis representantes (1,6%) y EH-Bildu tiene cinco diputados con el 1% de los sufragios.

Logra dos representantes en la Cámara Baja Navarra Más (que suma en Navarra a PP, UPN y Cs) y el 0,4%, en tanto que Compromís se queda con un escaño y el 0,65%; también entra en el Congreso un diputado del PRC (0,2%) y otro de Coalición por Melilla (CPM).