Uno de los rituales de todos los 22 de diciembre es que la gente que está entre el público en el salón del Teatro Real puede pedir que se compruebe si su número está entre las 100.000 bolas que hay en los bombos que repartirán una lluvia de millones.
Un empleado de Loterías y Apuestas del Estado y enseña al interesado que su número, efectivamente, es uno de los que puede resultar agraciado.
La mesa está compuesta por cinco miembros, los dos bombos se colocan en el centro del escenario y siempre está previsto que haya dos bombos de reserva por si ocurriera algo. Las bolas ya están también colocadas en los paraguas y preparadas para ser introducidas en los bombos.
¡Comprueba si tu número es el premiado!