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El desencuentro entre el Gobierno y la oposición y la división entre las asociaciones marca el homenaje dado en el Congreso de los Diputados a las Víctimas del Terrorismo. Las mitad de las asociaciones invitadas al acto se han quedado fuera en protesta por la política de acercamiento de presos etarras y los acuerdos del Gobierno de Sánchez con EH Bildu.

Sesión presidida por las presidentas del Congreso, el Senado y el Tribunal Constitucional en el que el Parlamento celebra el día de las Victimas del Terrorismo en recuerdo de la primera víctima de ETA, hace hoy 61 años.

Antes de comenzar, Edmundo Bal, portavoz de Ciudadanos reprochaba la política de alianzas del Gobierno. Bal ha criticado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por "blanquear a los herederos del terrorismo". "Otegi, que justificaba la violencia, nunca ha pedido perdón. Esta persona, pidiendo los indultos para los presos por asesinatos de ETA, es socio del Gobierno de Sánchez", ha señalado Bal.

Ha sido la tónica de las declaraciones de los partidos de la oposición al acto conmemorativo y que ha llevado al presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Tomás Caballero, a hablar de memoria, dolor y también de división entre las víctimas. Caballero ha exigido al Congreso y al Gobierno que reflexionen sobre la ausencia de muchas asociaciones que representan a este colectivo y que entre todos se tomen medidas para facilitar su vuelta al mismo.

Ha destacado que las víctimas siempre se han caracterizado por su "respeto a las leyes y normas establecidas" lo que, ha añadido, no les ha impedido "reivindicar aquello que considerábamos justo".

"¿Qué está sucediendo que genera estas ausencias en este día tan señalado?", se ha preguntado

Los ausentes, ha dicho, cuentan con toda su "consideración y respeto" y, a continuación, ha pedido a todos los presentes que reflexionen sobre los motivos que provocan esas ausencias. "¿Qué está sucediendo que genera estas ausencias en este día tan señalado?", se ha preguntado.

Caballero ha hecho pública su "preocupación" por esta situación y ha instado "a quien proceda al análisis y acciones eficaces para recuperar la voluntad empática, sensible y solidaria perfectamente definida en el preámbulo de la ley aprobada aquel 22 de septiembre de 2011.

Otras dos asociaciones presentes recuerdan que este acto es un homenaje del Congreso y no del Gobierno.

Por su parte, Meritxell Batet ha eludido entrar en polémicas. El protagonismo es únicamente de las víctimas. “Convoco este acto porque creo en él y en su sentido, convencida de que actos como este son los que hacen comunidad y, sobre todo, los que hacen Estado”, afirmó, al tiempo que indicó que estas convocatorias c “fortalecen nuestras instituciones democráticas y los valores sobre las que se cimientan”.

Añadió que este reconocimiento del Congreso a las víctimas del terrorismo “nos hace más dignos como sociedad” y es “el homenaje y la expresión de respeto” que las Cortes deben ofrecer a quienes han sufrido en España la violencia terrorismo.