Una joyería de Arganda del Rey, investigada por una presunta estafa que afecta ya a más de 50 clientes

La Guardia Civil investiga a una joyería de Arganda del Rey tras acumular más de 50 denuncias por una presunta estafa relacionada con la reparación y valoración de joyas. Los afectados acusan al responsable del establecimiento de quedarse con piezas que le habían entregado para arreglar o tasar y no devolvérselas nunca.

Los clientes aseguran que durante meses recibieron todo tipo de excusas cuando preguntaban por sus pertenencias: que el dueño tenía al gato enfermo, que debía acompañar a su madre, que tenía citas médicas o problemas con el taller. Estas justificaciones se repitieron hasta que, finalmente, la joyería cerró sus puertas.

Uno de los denunciantes explica que, tras el cierre, el joyero le comunicó que estaba valorando la pieza porque “el taller no me la devuelve”. Sin embargo, las víctimas coinciden en que habían depositado su confianza en el establecimiento y lamentan haber sido engañadas en un lugar al que acudían habitualmente.

Entre los bienes desaparecidos hay objetos de gran valor sentimental y económico. Una afectada relata la pérdida de una medalla que tenía un fuerte significado personal. Otro denunciante asegura haber entregado un reloj suizo de oro, con cadena también de oro, valorado en 4.100 euros.

Las redes sociales han jugado un papel clave en conectar a los damnificados. A través de Facebook, muchos descubrieron que no eran casos aislados y comenzaron a intercambiar información. Una de las denunciantes afirma que hay personas que aún no han presentado denuncia y sospecha que también podría existir deuda económica con otros clientes.

Algunas víctimas aseguran haber visto al joyero salir de un “compro oro” situado en la calle Alcalá número 40 de Arganda del Rey, lo que incrementó las sospechas sobre el destino de las piezas.

El caso se encuentra actualmente en fase de instrucción. Hasta el momento se han producido dos detenciones y hay una persona investigada. Las víctimas temen que el importe total presuntamente estafado pueda superar los 100.000 euros.

Las autoridades continúan recopilando testimonios y analizando la documentación aportada, mientras los afectados esperan recuperar, al menos, parte del valor de sus joyas.