La Policía Municipal de Madrid hizo 124.000 pruebas de alcohol y drogas el año pasado. Además, en la capital se registraron más de 20.000 accidentes en vías urbanas. Diciembre fue el mes con la peores cifras y agosto el que tuvo las mejores.
Más del 90 por ciento de los controles dieron negativo y solo unos pocos se negaron a someterse a las mismas.
En los casos más graves más de 3.000 conductores acabaron detenidos o investigados por conductor bajo los efectos del alcohol en la capital.
El Ayuntamiento de Madrid asegura que su ordenanza está dando sus frutos. "Son buenas noticias porque se está reduciendo la siniestralidad", explica el concejal de Urbanismo, Borja Carabante.
Además la Policía Municipal también arrestó o investigó el año pasado a 4.658 conductores por delitos contra la seguridad vial.
El alcalde Martínez-Almeida, que daba hace unos días la bienvenida a los 209 nuevos policías municipales, y les calificaba de "escudo y abrazo" de la ciudad, reclama al Gobierno central cambios en la tasa de reposición. Las zonas con más refuerzos son Centro sur, Latina y Carabanchel.