El pantano de Navacerrada se encuentra al 69% de su capacidad hídrica. Aunque inferior a otros años, no está mal, si tenemos en cuenta que el pasado mes de octubre este pantano se encontraba al 25% de su capacidad.
En el conjunto de los embalses gestionados por Canal de Isabel II, las reservas de agua almacenadas han finalizado el año 2019 al 66,2 por ciento de su capacidad total con 624,7 hectómetros cúbicos, un dato que supera en cuatro puntos la media registrada para estas fechas durante los últimos 30 años. No obstante, los embalses de la región están nueve puntos por debajo del volumen embalsado en las mismas fechas del año pasado, cuando los embalses marcaban récords con valores alrededor del 75 por ciento de su capacidad máxima.
Las lluvias de noviembre y diciembre provocaron abundantes aportaciones en los embalses, que solo en el último mes del año pasaron de estar al 52,6 por ciento de su capacidad, y seis puntos por debajo de la media, a superar en cuatro puntos los valores medios y situarse en el 66,2 por ciento de su capacidad máxima, con valores por encima de la media histórica.
Esta situación es superior a la de la media nacional.
La reserva hidráulica española está al 56,6% de su capacidad total ya que los embalses almacenan actualmente 31.487 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, al aumentar en la última semana en 509 hectómetros cúbicos (el 0,92 por ciento de la capacidad total actual de los embalses).
Por ámbitos, en el Cantábrico Oriental la reserva se encuentra al 89%; en el Cantábrico Occidental, al 89%; en Miño-Sil, al 89,3%; en Galicia Costa, al 90,4%; en las Cuencas internas del País Vasco, al 100%; en el Duero, al 69,3%; en el Tajo, al 48,9%; en el Guadiana, al 40,5%; y en Tinto, Odiel y Piedras, al 75,5%.
Mientras, en Guadalete-Barbate está al 49,5%; en Guadalquivir, al 45%; en la Cuenca Mediterránea Andaluza, al 49,6%; en el Segura, al 34,2%; en el Júcar, al 40%; en el Ebro, al 79,5%; y en las Cuencas internas de Cataluña, al 64,1%.