Vídeo: REDACCIÓN | Foto:Telemadrid
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Tras dos años con el rostro tapado se requiere un proceso de adaptación. Los psicólogos lo llaman el "síndrome de cara vacía" y genera estrés y ansiedad.

Madrid pide el fin de la mascarilla obligatoria en interiores, salvo en residencias, hospitales o transporte público

Los más afectados son los adolescentes porque durante todo este tiempo de pandemia han cubierto sus inseguridades con una mascarilla quirúrgica. Miedo e inseguridad, la mascarilla en los adolescentes ha servido para ocultar cambios físicos y emocionales, como tratamientos dentales, vello o acné.

Sin la mascarilla hay que enfrentarse al momento vital en la adolescencia: aceptación o rechazo. Prescindir de ella de manera paulatina y comenzar por entornos seguros, la familia, los mejores amigos.

Adiós a las mascarillas en interiores: ¿Puede obligarme la empresa a ponérmela? ¿Qué pasará en los colegios?

Ahora se puede producir una nueva situación, cómo asimila nuestro cerebro la visión de una persona de la que solo hemos conocido la mitad de su rostro.