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El último jefe de ETA, David Pla celebraba este domingo el éxito de EH Bildu en las Elecciones del País Vasco. El etarra, detenido en Francia y condenado por pertenencia a banda armada, quedó en libertad hace cuatro años. Él fue uno de los terroristas que, encapuchados, leyeron el comunicado de cese definitivo de la violencia armada en 2011. Hoy es responsable de estrategia de Sortu, matriz del partido de Otegi.

En la sede de Bildu se le pudo ver celebrando el resultado, eufórico tras el triunfo de su partido.

A Pla se le arrestó en 2015 en Francia por su planificación de ataques armados y por llevar a cabo acciones violentas.

Con estos resultados, el soberanismo vasco sigue creciendo en Euskadi.

Con los resultados del PNV, hegemónico históricamente en esa comunidad, y Bildu, con 340.000 votos, el nacionalismo vasco arrasa y alcanza el mejor resultado de su historia. Si en 1980, juntos sumaban 36 escaños, 44 años después son ya 54: casi tres cuartas partes del parlamento vasco.

Otxandiano destaca el resultado "histórico" de Bildu

Los resultados tiñen el mapa del País Vasco de dos tonos de verde: el PNV es la fuerza más votada en 90 municipios; pero Bildu, la formación heredera del brazo político de ETA, domina en más de 150 localidades.

Las víctimas del terrorismo aseguran que hoy es un día triste para ellas. Así lo expresa Maite Araluce, presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo.

Igualmente, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) ha lamentado este lunes que a EH Bildu "no les pase fractura" y haya conseguido su mejor resultado histórico pese a no condenar el terrorismo. "No solo no condenan el terrorismo, ni siquiera consideran terrorismo los crímenes de ETA. Y no les pasa ninguna factura", ha expresado la organización, recalcando que entre los miembros de Bildu se encuentran "las mismas caras" de Batasuna y que comparte con ellos "las mismas soflamas de independencia" o "Jota ke irabazi arte" (Dale duro hasta vencer).