El efectivo se desvanece: pagos digitales baten récords en España

El Banco de España ha confirmado lo que ya se percibe en el día a día: el uso del efectivo continúa cayendo en favor de métodos de pago digitales.

En 2024, los pagos con tarjeta, transferencias y móvil crecieron un 10,5% respecto al año anterior, marcando un nuevo récord en el país. Y todo apunta a que esta cifra seguirá aumentando en 2025.

En la segunda mitad de 2024, se realizaron 9.300 millones de operaciones sin efectivo, lo que refleja un cambio estructural en la forma en que los españoles gestionan sus compras.

El dinero físico —billetes y monedas— se ve cada vez menos en los bolsillos. “Llevo nada. Pago con la tarjeta y ya está”, comenta un ciudadano en la calle, reflejando una tendencia generalizada.

Mientras los cajeros automáticos pierden protagonismo, nuevos métodos de pago como bizum ganan popularidad entre usuarios de todas las edades. Muchos ven ya al efectivo como algo obsoleto, algo que recuerda a lo que ocurre en países como Japón, donde no es raro encontrar carteles que advierten: “No se acepta efectivo”.

“¿Vamos por ese camino? Yo pienso que sí. Aquí en Europa ya pagamos cantidades ingentes con tarjeta”, opinan algunos usuarios.

A pesar del avance de la digitalización, hay quienes aún defienden llevar algo de efectivo encima. “Ahora mismo llevo 7 euros, pero normalmente me gusta llevar al menos 50, por cualquier imprevisto”, explica otro.

Las tarjetas siguen siendo el instrumento de pago más utilizado. En la actualidad, existen 114 millones de tarjetas en circulación en España, lo que supone una media de al menos dos tarjetas por habitante.

El futuro del dinero en efectivo parece cada vez más limitado, mientras España avanza hacia una economía donde lo digital es ya la norma, no la excepción.