Consternados, acudían esta mañana los padres de los niños a la guardería del barrio de Sanchinarro a la que asistía la niña fallecida ayer en el interior del coche de su padre. El padre, que la dejó olvidada en el vehículo, ha declarado ya y ha quedado en libertad con cargos.
Hoy, en SanChinarro, ha costado llevar a los niños al cole. Algunos padres estaban presentes cuando encontraron a la niña en el coche. Hoy los rostros de los padres, de las madres, y de los profesores seguían reflejando la angustia.Un año y nueve meses tenía la niña. Estuvo siete horas encerrada en el coche. A tan sólo tres metros de la guardería. El padre tuvo que ser atendido por los psicólogos del SAMUR. En esta guardería pasará hasta que se pueda superar la tragedia.