El mundo influencer no está reservado a los humanos en exclusiva. Cada vez más animales se alzan con el título de macro influencers. Sobre todo perros. El negocio de las mascotas se ha fijado en ellos, y les reclama lo mismo que pueda hacer Dior con las influencers de moda. Es el caso de Pippa, una chihuahua con 62.000 seguidores en Instagram.
Con un caché de 350 euros
Solo pesa un kilo y cabe en un bolso de mano. Y aún así, es una de las 'reinas' de Instagram. La cuenta de @pippa.thechihuahua ya suma en Instagram 62.000 seguidores. María Reyna, su dueña, es quien maneja 'los hilos'. "Empecé a colgar fotos de Pippa en mi cuenta y vi que gustaban mucho, así que se me ocurrió abrir una cuenta a mi perra".
Y visto y no visto... los seguidores de su querida Pippa pronto superaron a los suyos. Las tiendas le regalan prendas, alimentos... y le llegan a pagar 350 euros por sesión de fotos. El bolso en donde viaja, por ejemplo, fue un regalo y cuesta unos 800 euros.
Le siguen sobre todo mujeres de entre 25 y 40 años. La mayoría, personas con perro
Está claro que el negocio de perros mueve mucho dinero: venden desde ropa hasta perfumes para perros, pajaritas para bodas, patucos... Lo último son los jerseys de alpaca peruanos, que pueden costar 109 euros. Todo un lujo que precisa de modelos con alcance como el caso de Pippa, capaz de llevar lo último en moda canina a miles y miles de personas en una sola foto.
