¿Cómo entrenan los agentes forestales a los perros que patrullan el campo de Madrid en busca de veneno?
- Aunque es ilegal, el uso de cebos envenenados sigue presente
En los montes y campos de la Comunidad de Madrid, los agentes forestales cuentan con perros especializados en detectar venenos ocultos en cebos y animales.
Esta práctica ilegal, heredada de métodos tradicionales para el control de fauna, sigue siendo preocupantemente frecuente.
Los perros, como Otto, son entrenados para localizar estas sustancias sin ingerirlas, una tarea peligrosa que requiere precisión y obediencia absoluta.
¿Por qué hay cada vez más alergias?
Aunque los agentes trabajan con dedicación, estiman que solo detectan entre un 5% y un 10% de los casos reales.
Los cebos desaparecen rápidamente tras ser ingeridos por animales salvajes, lo que dificulta las investigaciones. Aun así, ya se han producido condenas por este delito, con multas que pueden alcanzar los 15.000 euros.
Más allá de su labor preventiva, estos perros también han sido clave en operativos de búsqueda, como en Valencia, donde ayudaron a localizar animales enterrados.
