Un informe del “Observatorio del Desempleo de Larga Duración” de la Fundación Santa María La Real nos alerta de que el 47 por ciento del total de desempleados es de larga duración y el 50 por ciento de ellos, no recibe ningún tipo de ayuda. Incluso en algunos casos, se encuentran en riesgo de exclusión social, lo que acaba con lo que resulta absurdo suponer, como a veces puede pensarse, que estas personas no están interesadas en encontrar trabajo.
Así lo ha indicado Laura Oncina, Responsable de Investigación Social en la Fundación Santa María La Real, que además ha añadido que de antemano solo el 51 por ciento de los desempleados de larga duración buscan trabajo a diario, y que a medida que pasa el tiempo esa cifra decae, sobre todo, por su perfil deja de ser adecuado para el mercado laboral. Muchos menos buscan trabajo, muchos menos acceden a entrevistas de trabajo y todo porque les faltan herramientas pre- laborales.
Eso indica que sus necesidades no son únicamente laborales, también son económicas, emocionales, psicológicas y educativas. Es decir, a juicio de este informe, tal y como nos ha explicado, Laura Oncina, es muy importante reforzar la coordinación entre los Servicios Públicos de Empleo, los Servicios Sociales y las Entidades Sociales o Tercer Sector.
Desafortunadamente, este informe también ha dejado claro que existen muy pocos programas específicos para desempleados de larga duración. Y también que es importantísimo coordinar los datos entre las diferentes entidades, de forma que cada persona tenga un seguimiento y un historial que manejen todas los servicios a los que pueda acudir y reciba así el trato más adecuado.
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