Varios vecinos de Manzanares el Real denuncian la situación que sufren debido a los residuos fecales vertidos, desde una tubería, en el paso del río Manzanares por su pueblo. Estas aguas contaminantes desembocan en el embalse de Santillana, concluyendo la muerte de peces que viven en la zona y de animales que beben este agua, animales como zorros y corzos (encontrados muertos en los alrededores) y las vacas de una ganadería cercana.
La situación es tal, que el SEPRONA ya se ha desplazado hasta Manzanares el Real para conocer los desperfectos provocados por las aguas fecales que afectan al entorno del municipio.
Desde el Ayuntamiento, su alcalde José Luis Labrador asegura que ya se están tomando medidas y que este desbordamiento viene provocado por un “tapón de toallitas” en la tubería destinada a las aguas fecales, tapón que ha obligado a dichas aguas a desembocar en el río a través de una tubería fluvial.
Un grupo de manzanariegos hartos por los hechos, no hacen más que denunciar este caso, debido a que, según ellos, “nadie les escucha”.
