(Actualizado

El coronavirus ha puesto el mundo patas arriba y ha obligado a modificar la mayoría de nuestras costumbres, también la de ir a misa el domingo. Por eso, no habrá que extrañarse cuando a partir de ahora una luz roja de un semáforo a las puertas de un templo nos impida participar en la celebración litúrgica. Eso es precisamente lo que ocurrirá en la catedral de La Almudena cuando Madrid pase a la fase uno de desescalada.

El semáforo colocado en el único acceso abierto del templo permitirá contar a los fieles que entren a misa o a rezar. Una vez que un tercio del aforo esté completo, la luz roja del semáforo indicará que ya no puede entrar nadie más.