Sumergirse en el fondo del mar y ver de cerca a una ballena, tirarse haciendo puenting o viajar por todo el mundo. Es algo que vamos a hacer a través de la realidad virtual, sin salir de una sala. Un nuevo entretenimiento con el que están muy familiarizados los más jóvenes pero que causa gran impresión a los mayores. Incluso ya comienza a utilizarse como terapia.
Para ello, hemos estado en el centros de realidad virtual Only Vr Store, en Boadilla del Monte, en los que se pueden reservar salas de realidad virtual para disfrutar de experiencias únicas y juegos en tres dimensiones, para entrar en una realidad paralela.