La Policía encuentra en Coslada el móvil robado del anciano al que asaltaron en su propia casa
- Fue secuestrado y amordazado para robarle medio millón de euros
- Ha sido citado para declarar y entregar su segundo teléfono
Un equipo de Madrid Directo acompaña a Ricardo, un vecino de la calle Alcala que fue secuestrado y amordazado en su propia casa para robarle medio millón de euros, a comisaría, donde ha sido citado a mediodía para declarar y entregar su segundo teléfono.
Al parecer, su otro teléfono móvil fue encontrado por la Policía roto en Coslada. "Todo lo que yo tenía en la vida lo he perdido, económico, de mi trabajo de toda la vida y me he quedado sin nada", nos cuenta Ricardo de camino a comisaría muy indignado.
Fue el pasado 8 de diciembre cuando Ricardo abrió la puerta, pensando que era su cuidadora, a tres encapuchados, que emplearon una violencia brutal contra él para llevarse medio millón de euros en monedas de oro que tenía guardados en una caja fuerte.
Amordazan y dan una paliza a un hombre de 77 años en su propia casa para robarle
Lo más sospechoso de lo sucedido es que el anciano, pese a la paliza y las amenazas de muerte, no reveló en ningún momento la clave de la caja fuerte. "Se fueron para arriba y ellos abrieron. Esos individuos sabían la clave. Me robaron todo lo que había en casa, pero también se llevaron las llaves de un coche eléctrico que compré hace poco tiempo", nos contaba.
Hace apenas dos días, tuvimos la oportunidad de hablar, en exclusiva, con la persona más cercana a Ricardo, su cuidadora y, al parecer, actual pareja, tras declarar durante cinco horas ante la Policía.
Tras declarar 5 horas ante la Policía, habla la cuidadora del anciano al que asaltaron en su propia casa
Su "cuidadora" nos contaba que minutos antes del suceso se encontraba con él en la calle. "Le dejé en la calle Gobernador para que él entre y, nada, es que ha sido al momento que ha pasado. Han esperado a que yo me vaya, de que él esté solo".
De hecho, nos aseguraba que la combinación de la caja fuerte tan solo la sabían el cajero, la empresa que vino a arreglarla, Ricardo y ella. Cree que los que hicieron esto a Ricardo fueron las personas que le vendieron el coche eléctrico del cual, como hemos mencionado anteriormente, también se llevaron las llaves.
