Día de Todos los Santos en el único cementerio de mascotas de Madrid
- Los dueños dejan flores y recuerdos en las sepulturas
Entre pinares, viñedos y veredas, hace 40 años abrió en Arganda del Rey un lugar de descanso para mascotas, donde también son muchas las personas que lo han visitado para recordarlas por el Día de Todos los Santos.
Se conoce como 'El Último Parque' o la residencia de los fieles amigos del hombre y es el único cementerio de mascotas de Madrid. En un ambiente quizá menos serio, pero igual de sentido, aquí descansan alrededor de 4.000 mascotas.
"El primer perro que se enterró de manera oficial fue Chiruca en 1983. Por eso tiene el cementerio 40 años de antigüedad. Hay canarios, hámsteres, cualquier tipo de animalito que pueda convivir en una casa".
Los animales son enterrados en tumbas con lápidas de mármol o granito, adornadas con estatuas, jarrones, flores y algunos monumentos funerarios. Sin lugar a dudas, el amor a las mascotas es infinito y son consideradas como un miembro más de la familia. "Se hacen querer. Ellos no nos fallan, no nos traicionan, nos quieren siempre".
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Fabiola y Julio no solo decoran la tumba de sus perros, sino también las de todo el cementerio. "Vamos al cementerio de las personas humanas y las flores que va tirando la gente las reciclamos, las limpia mi mujer y las ponemos otra vez aquí para darles nuevo uso para nuestros animalitos".
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Camila decidió darle un toque personal a la sepultura de su perro con una inscripción en su lápida. "Echo mucho de menos a Blu y lo tengo tatuado para recordarlo. Ha estado conmigo nueve años y se me murió en mayo. Lo voy a extrañar mucho para siempre". Un para siempre tan grande como el amor que le regaló.
