Día a día nos enfrentamos a situaciones y problemáticas diferentes. En el plano profesional, en el mundo académico y en la vida cotidiana hay gente que, sin quererlo o queriendo, nos hace daño.
¿Y qué es mejor? ¿Perdonar o vengarnos?
Perdonar puede ser la opción más complicada y más madura. Sin embargo, los expertos señalan que es la mejor opción. Vivir con rencor o preparar una venganza puede llegar a ser perjudicial para la salud.
Cuando tramamos algo para devolver el daño causado despertamos una hormona llamada Cortisol. Vivir con esta sensación hace que tengamos dolores de cabeza, musculares y en definitiva que termine dañándonos a nosotros mismos.
