Cantora: El sueño de Paquirri que se convirtió en un búnker para Isabel Pantoja
- La finca fue un motivo de distanciamiento entre la tonadillera y su hijo Kiko Rivera en 2020
Cantora es una finca de 500 hectáreas donde Francisco Paquirri disfrutaba de sus terreros y de su pequeña plaza de toros. Isabel Pantoja contaba a los medios en una visita a la finca que el gran sueño de ella y su marido era tener muchos hijos en ese hogar. La tonadillera asegura que el diestro no pudo ver la casa como tenían planeado, pero ella se encargó de llevar a cabo su sueño.
En la actualidad, la casa tiene más de 2.000 metros construidos y se dividió en dos plantas, en un garaje anexo, una piscina y una pequeña plaza de toros que está algo deteriorada. Tras la muerte de Paquirri en 1984, la herencia del torero fijaba que la propiedad de la finca se dividía en el 51% para Isabel Pantoja y el 49% pasó a su hijo Kiko Rivera.
Isabel Pantoja no consigue vender la finca de Cantora
La muerte repentina de Paquirri provocó algunas disputas de la tonadillera con los hijos del torero que tuvo con Carmina Ordoñez. Fran y Cayetano Rivera siempre han reclamado una serie de trajes de luces y capotes de su padre que guardaba allí. La finca se convirtió en un búnker para Isabel que no permitía el paso a los periodistas.
La propiedad de la casa se convirtió en un motivo de distanciamiento entre Isabel y Kiko Rivera a finales del 2020. Personas como Julián Muñoz, Diego Gómez o el hermano de la tonadillera, Agustín han vivido o entrado en esa casa.
