Comer es probablemente uno de los mayores placeres humanos. Tomar alimentos que nos gustan mejora nuestro estado de ánimo. Entre todos los sabores y texturas que podemos paladear, hay un producto que se ha convertido en indispensable en nuestros días: el café. Analizamos la relación de Madrid con esta bebida que no deja de ser una infusión natural. En Madrid no ha habido históricamente una gran cultura cafetera, pero el sector está cambiando. Y es que 8 de cada 10 españoles toman café a diario.
Y además conocemos cómo se preparan otros productos que nos acompañana en nuestro día a día: la repostería, un campo en el que el consumidor vuelve a buscar sabores y procesos tradicionales, y el marisco, que lejos de estereotipos antiguos, hoy está al alcance de todos los bolsillos, con una preparaciones industrializadas pero que mantienen elaboraciones caseras.
La gastronomía, en definitiva, no solo nos aporta placer, sino que nos brida espacio para compartir tiempo con familiares y amigos, nos permite conocer otras culturas o desarrollar nuestra faceta más creativa elaborando nuevas recetas.
