Si os gustan los deportes de invierno y si tenéis una resistencia casi sobrehumana, esta competición es para vosotros. En el pequeño pueblo de Oberstdorf, en la frontera entre Austria y Alemania, más de 500 atletas se dan cita estos días con unas condiciones gélidas. Tienen que enfrentarse a ascensos imposibles y cargas de hasta 50 kg.