Rubiales denuncia una “cacería woke” y asegura que su polémica fue utilizada para desviar la atención de decisiones del Gobierno

Luis Rubiales ha visitado esta noche El Análisis Diario de la Noche para hablar de su libro ‘Matar a Rubiales’, una obra que va mucho más allá del polémico beso a Jenni Hermoso y que busca ofrecer su versión de múltiples conflictos y decisiones que marcaron su etapa en la RFEF.

El expresidente de la RFEF sostiene que el escándalo se produjo en un contexto político complicado: “El ataque hacia mí vino de que Sánchez dijo que ‘jamás iba a amnistiar a nadie’”. Rubiales añade que coincidió con momentos críticos en los que se cerraban pactos en Bruselas: “Justo en el momento en que Cerdán viajaba a Bruselas, justo en el momento en que se estaban cerrando pactos que él juró que no haría, para mí esto no es casualidad”.

En su opinión, la polémica sobre el beso se convirtió en un foco de atención que desvió el debate de otros asuntos políticos del Gobierno. Rubiales se presenta así como objeto de lo que él considera una “cacería” mediática, utilizada para centrar la crítica sobre su persona mientras se producían otros acontecimientos de relevancia política.