Tiene sólo ocho años y maravilla al mundo. Paige Calendine es una gimnasta que nació sin piernas y compite con el equipo de su pueblo, Zanesville Gymnastics. "Llevo en la gimnasia desde hace 18 meses. Es lo que más me gusta hacer. Es bastante fácil y puedo hacer de todo porque tengo mucha fuerza", explica la pequeña.
Su entrenadora, Mallory Gardner, se quedó asombrada desde el primer contacto que tuvo con ella: "La primera vez que vino a entrenar, no podía creer lo fuerte que era y lo rápido que podía moverse. Es fantástica y no deja que nada se interponga en su camino".
La gran dificultad de Paige a la hora de competir son los jueces, que no saben cómo calificar los ejercicios de una gimnasta sin piernas. Pero ella lo tiene claro: "Tengo muchas medallas y voy a ganar muchas más".