Esta es la historia de un pedante y vanidoso abogado de éxito al que no se le pone nada por delante. O eso cree él. Esta es la historia del juez de la corte del pequeño pueblo de Carlinville. Lo es desde hace más de 40 años. Son padre e hijo, pero no se dirigen la palabra. Los fantasmas del pasado, e incluso del presente están más que vivos en su ánimo. Pero cuando un suceso tremendo revuelve la vida del anciano, acabarán trabajando codo con codo por más que les pese. Esta es una historia de excelentes críticas y de taquilla lustrosa. Pero además es la historia que os proponemos para El Megahit Sin Cortes: “El juez”.
Filmada en Boston y en diferentes localizaciones reales del estado de Massachusetts, por el joven director David Dobkin proveniente del mundo del video clip y con algunas taquilleras comedias en su haber, consiguió reflejar con sutileza sumamente precisa una relación familiar completamente rota y muy difícil de recomponer. Le da al drama lo que es del drama y al suspense lo que es del suspense y consigue mantenernos en vilo durante todo el metraje, intuyendo que algo ocurre, pero sin adivinar el qué. Lo mejor es, por supuesto, el duelo interpretativo al más alto nivel entre los dos protagonistas: Un actor de 88 años que consiguió ser por unos meses el candidato a un Oscar de interpretación más anciano de la historia, por su trabajo en “El Juez”, Robert Duvall, y una estrella muy taquillera que andaba muy necesitada de que su traje de superhéroe se aireara un poco.
Robert Downey de “Sherlock Holmes”
Evidentemente de esa excelente acogida buena parte del mérito se la lleva Robert Downey. El que fuera el mejor ejemplo del juguete roto hollywoodiense – probó la marihuana a los 8 años de manos de su padre, un director de cine underground ya olvidado - es, sin duda, el actor del momento. El único que mantiene dos franquicias de éxito espectacular en perfecta forma, gracias dos personajes que son como la noche y el día: el mundano millonario Tony Stark y el misterioso y excéntrico Sherlock Holmes, últimamente más envuelto en las sombras si cabe. Por ello, la industria que le obligó a hacerse análisis diarios para detectar drogas si quería volver a trabajar, le ha devuelto su sitio y ha vuelto a valorar su enorme talento. El mismo que le llevó a ser candidato al Oscar antes de los 30 por interpretar a un “Chaplin” con todos los matices.
Lo consiguió de nuevo y ganó un Globo de Oro, por encarnar a un actor blanco que se tizna la cara para interpretar a un soldado negro. En medio de un buen escándalo, pero Downey, desde la cumbre donde nos mira no está para darle bola a los ofendiditos. “El juez” la produce él mismo a medias con su esposa, la poderosa Susan Levin, artífice de la saga Holmes y a la que le debe en lo personal y en los profesional su actual éxito en ambos campos.
El reparto contiene, además, al ganador del Oscar Billy Bob Thorton, segundo marido de la bella Angelina, a la candidata Vera Farmiga y a ese actor tan carismático al que es imposible imaginar si su chaqueta metálica: Vincent D´Onofrio.