Los secretos de la Plaza de Oriente: La “estatua de Galileo" y el laberinto secreto

  • La Plaza de Oriente cuenta con las estatuas de todos los reyes visigodos que reinaron en la península

Cerca de la calle Bailén se encuentra la plaza de Oriente del Palacio de Bonaparte. La Plaza de Oriente está decorada con las estatuas de los reyes visigodos. Las estatuas de los reyes visigodos estaban planeadas para ir colocadas en la fachada del Palacio Real.

Felipe IV mandó hacer una réplica como estatua de un cuadro suyo, donde sale montado en un caballo a dos patas, en la plaza de Oriente. Al ser una postura elevada y con un material pesado, el rey pidió ayuda a Galileo Galilei para que conseguir construir la estatua y resolverle el problema. La solución fue poner la mayor parte del peso en las patas traseras del caballo y dejar hueco el resto de la estatua que se mantiene en el aire sin un punto de apoyo.

El monumental proyecto de la Plaza de Oriente
El monumental proyecto de la Plaza de Oriente
El monumental proyecto de la Plaza de Oriente

El monumental proyecto de la Plaza de Oriente

Un lugar secreto de la Plaza de Oriente se encuentra en el subsuelo. Antiguamente, debajo de la plaza de Oriente se encontraban unos laberintos que comunicaban el Palacio Real con el Teatro Real para que la realeza no tenga que entrar por donde entraban todo el mundo.

La calle Bailén recibe su nombre desde 1835 cuando murió Fernando VII y se llama así en honor a la batalla que gana el General Castaños a las tropas francesas de Napoleón. Otros nombres que ha recibido ha sido la calle nueva o la calle de las caballerizas nuevas porque ahí se encontraban las caballerizas de Isabel de Farnesio.

Los edificios más destacados de la calle Bailén son el palacio de Grimaldi, el edificio del Senado y el Palacio Real que se empezó a construir en 1837 después de un incendio que se produjo en la nochebuena de 1834.