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La nieve y el hielo se acumula todavía en las calles de Parla. Para solucionar esta situación, dado que el dispositivo municipal no llega a todos los puntos de la localidad, vecinos como los de la calle San Sebastián intentan con picos y palas que las aceras y calzadas puedan ser transitables. Una semana después de la gran nevada, los establecimientos de la zona todavía no han podido abrir sus puertas.

Manuel, propietario de un taller explica que "es necesario para poder reabrir los negocios que la acera esté despejada y que así la gente pueda moverse, sino la nieve continuará aquí durante semanas y esto es un infierno".

Además los vecinos han tenido que echar una mano para poder rescatar a un camión de bomberos y a una ambulancia que han quedado atrapadas. "La ambulancia venía a recoger a un enfermo grave con problemas respiratorios, y debido a la nieve y el hielo, se quedó sin poder salir de la calle Felipe II. Menos mal que entre todos conseguimos sacarla", explica José, uno de los vecinos que prestó auxilio.