¿Puedo reclamar la nueva tasa de basuras? La OCU explica cómo hacerlo y cuáles son los plazos
Estos son los pasos a seguir para presentar una reclamación en caso de no estar de acuerdo con la nueva tasa de basuras de tu ayuntamiento
El basurazo lo llaman, la tasa de residuos que los ayuntamientos de más de 5.000 habitantes deben cobrar desde este año a los vecinos para asumir los costes reales tanto de la recogida de la basura como de su reciclaje.
Esta nueva tasa de basura es una directriz europea de 2018 sobre gestión de residuos que obliga a todos los estados miembro a trasladar este coste a los contribuyentes. Sin embargo, desde la OCU creen que "no prima el principio de equidad" y que algunos ayuntamientos no están calculando de manera "justa" este impuesto.
Las primeras notificaciones con el cobro del nuevo impuesto ya han empezado a llegar a los hogares, lo que ha suscitado la siguiente pregunta: si no estoy conforme con la nueva tasa de basura, ¿puedo reclamar?
La respuesta rápida es sí, puedes reclamar, pero en ningún caso dejar de pagarla, ya que se trataría de una insumisión tributaria con consecuencias.
Ileana Izverniceanu, directora de comunicación y portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), nos explica qué podemos hacer en caso de no estar de acuerdo con la cantidad a pagar de la tasa de basura y cómo podemos reclamar.
"Tenemos un mes desde que hemos recibido la notificación del impuesto", empieza contando Ileana Izverniceanu, que añade que "tenemos que hacerlo, a ser posible, por sede electrónica, a través de los canales online del Ayuntamiento de Madrid y presentar esa reclamación".
Tal y como explica la portavoz de la organización, "es un recurso muy sencillo que se puede encontrar en muchos sitios. Nosotros en OCU vamos a poner a disposición de todos los usuarios que crean que el impuesto no está calculado de la manera adecuada".
Una vez cumplimentado este recurso, "simplemente es presentarlo con copia de lo que nos han girado y esperar". "En caso de que nos lo denieguen, ya tendríamos que pasar a otras instancias mayores hasta llegar a lo Contencioso-Administrativo", datalla Izverniceanu.
Este nuevo impuesto que atiendo a una normativa europea basada en el principio "quien contamina paga" se ha implantado con el objetivo de costear todas las actividades relacionadas con la gestión de basuras, como la recogida, el transporte, el tratamiento, el mantenimiento de vertederos o las campañas de concienciación.
Asimismo, aunque viene de Europa, es cada Ayuntamiento el encargado de calcular la tasa a pagar por sus vecinos.
La tasa de basuras que se paga en Madrid, por ejemplo, se calcula a partir de una parte fija determinada según el valor catastral de la vivienda, a la que se suma una cuota adicional en función del barrio y el número de personas que habitan en una vivienda.
"Lo que dice esa directiva es que quien contamina debe pagar, por lo que no se puede fijar (la cuantía de la tasa) con el valor catastral como se está fijando en muchos municipios, no se puede fijar solo con el número de personas que hay en una vivienda. Se debería bucear un poco más en cómo se fija esa tasa, porque si no, hay un agravio comparativo y no se está respetando la capacidad económica de cada contribuyente", expone Izverniceanu.
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