Empieza en Santa Isabel y termina en la calle Valencia. Es una vía con siglos de historia. Debe su nombre a la Real Fábrica de Salitres que estuvo aquí entre 1778 y 1785.
A mitad de la calle encontramos la parroquia de San Lorenzo que data de 1662 y que es conocida popularmente como el "templo de las pulgas".
Como es habitual en las calles de Lavapiés, lo tradicional y lo actual, lo de fuera y lo madrileño, los comercios centenarios y los modernos locales, se dan la mano.