La nueva ordenanza de terrazas de Madrid no convence ni a hosteleros ni a vecinos

Las terrazas siempre han sido una fuente de disputa entre autoridades y hostelería y la nueva ordenanza municipal ha reavivado las ascuas al contemplar un endurecimiento de las sanciones a los hosteleros por incumplimiento, por ejemplo, del horario máximo permitido.

"Los horarios son de obligado cumplimiento por los establecimientos del sector que, lógicamente, en caso de incumplirse el Ayuntamiento de Madrid, a través de las competencias que tiene atribuidas, tiene potestad para corregir y sancionar", nos ha contado José Carlos Ramón, secretario ejecutivo de la Asociación Madrileña de Empresas de Restauración (AMER).

Ramón defiende el ruido derivado de las terrazas: "Este sector no es el más ruidoso y animo a que se compare, por ejemplo, con el de las obras en vía pública o del tráfico rodado".

Por su parte, los vecinos, denuncian que el tener una terraza debajo de casa es sinónimo de ruido por la noche: "No puedes descansar".