La lentitud al servir de los camareros y su falta de profesionalidad son los principales motivos para no volver a un restaurante, según un estudio sobre la percepción de los españoles de la hostelería, que también revela que se valora más la calidad de la cocina que el precio.
La importancia de un servicio profesional y atento es una de las principales conclusiones de este análisis efectuado por la Fundación Cruzcampo, ya que los españoles valoran "la profesionalidad y empatía del equipo humano, el servicio en mesa y la amabilidad en el trato" como cualidades más importantes en hostelería para los consumidores.
También le dan más relevancia a la calidad de la cocina que a los precios, por lo que el presidente de la Fundación Cruzcampo, Jorge Paradela, concluye que "es un signo de la recuperación económica de nuestro país y debe ser tenido en cuenta por los hosteleros españoles".
"Los consumidores son aún más exigentes y están dispuestos a premiar la profesionalidad del servicio, valorando la calidad de la experiencia por encima del bajo precio, por lo que juega un papel crucial la formación y profesionalización de la hostelería", añade.
Para los clientes de un restaurante, las cualidades imprescindibles de los camareros son dar una buena atención (69,3 %), ser agradables (63, 5 %) y tener un buen conocimiento del producto que sirve, algo fundamental para la mitad de los 1.000 encuestados.
También se aprecia el conocimiento de su oficio (46 %), la rapidez del servicio (41,7 %) y la atención personalizada (24,4 %).
En el país con mayor densidad de bares del mundo, uno por cada 175 habitantes, la calidad de los productos y la amabilidad en el trato están por encima de los precios a la hora de elegir un restaurante, y dominan como favoritos los de cocina española tradicional (79,3 %), seguidos de los de cocina de vanguardia (26,90 %) y los de gastronomías foráneas (2,80 %).
Entre los motivos por lo que no se vuelve a pisar un restaurante destaca la lentitud al servir de los camareros, seguido de su falta de profesionalidad y de precios caros, ambos equiparados por los comensales.
Según la encuesta, el 73,30 por ciento va a un restaurante o bar más de una vez a la semana, y casi el 60 % lo hace para tapear, mientras que cenar y almorzar son los siguientes motivos. El 39 % lo hace acompañado de su pareja, el 35,10 de amigos y el 17,10 de familiares, y menos del dos por ciento acude solo, lo que confirma el valor social de la gastronomía en España.
Las visitas se incrementan en verano para un 76,30 por ciento de los consultados, especialmente los fines de semana, y los bares con barra superan en casi diez puntos a los restaurantes en cuanto a lugares más frecuentados. Los bares "de toda la vida", son los favoritos para un 52,60 por ciento.