Un segundo georradar, que aportarán técnicos de la Universidad Autónoma de Madrid, llegó a Córdoba para apoyar la nueva búsqueda de los dos niños de 2 y 6 años, desaparecidos el pasado 8 de octubre, que se lleva a cabo en la finca de "Las Quemadillas".
Fuentes cercanas a la investigación han explicado a Efe que en primer lugar se peinará el terreno de la finca y las dos parcelas anexas con un georradar procedente de la Universidad de Huelva, que ha trabajado en el lugar desde las 11.30 horas hasta las 14.00 horas y continuará durante la tarde.
Con este dispositivo se pretende alcanzar una mayor profundidad en el terreno para detectar posibles alteraciones, además de mayor nitidez que con el que se utilizó en un primer registro de la finca al principio de la investigación.
El georradar de la Universidad de Huelva cuenta con una antena de 200 megahercios, mientras que el que aportará la Universidad Autónoma de Madrid, que se prevé que comience a trabajar a partir de las 18.00 horas, tiene una antena de 100 megahercios.
Los expertos pasarán los dos dispositivos por la finca metro a metro y se estima que estas labores puedan durar un par de días, mientras que posteriormente se procesarán los datos que los arqueólogos que también participan en el registro confían en tener el próximo jueves para empezar a trabajar.
En este sentido, según las fuentes, los únicos que podrán descartar al cien por cien si hay alguna irregularidad son los arqueólogos, ya que su metodología no se ve afectada por las interferencias de las líneas eléctricas, como ocurre con el georradar.
Por otro lado, el retraso de dos horas y media en la llegada de Bretón a "Las Quemadillas", prevista para las 9.00 horas, se ha debido a que el juez instructor, José Luis Rodríguez Lainz, no había redactado el auto necesario para su traslado desde la cárcel de Alcolea, donde permanece ingresado desde el 21 de octubre acusado de un presunto delito de detención ilegal.