Tejidos procedentes de fibras producidas ecológicamente, como el algodón, el lino, la caña o la lana de alpaca cobran protagonismo en la 31 edición de Biocultura Madrid que hoy ha abierto sus puertas en IFEMA con propuestas para una vida verde y sana de más de 800 firmas expositoras.
El certamen, en el que los productos de alimentación sana y natural representan más de la mitad de la oferta, apuesta este año por la ropa ecológica con el espacio "Planeta Moda" que "reúne a 63 empresas con certificaciones de sostenibilidad, impacto medio ambiental y producción local", ha dicho a EFEverde la directora del evento, Ángeles Parra.
En el pabellón 9 de la Institución Ferial de Madrid y durante cuatro días 800 expositores -27 de ellos internacionales- mostrarán las últimas novedades del sector: calzado, ropa para mujeres, hombres y niños, así como complementos, confeccionados en España en talleres artesanales o sociales, en los que también hay un componente social de ayuda a personas en riesgo de exclusión.
"Hacer moda ecológica en España es muy complicado en la medida en que intentamos educar a la gente para que sea más consciente en sus hábitos de consumo", ha dicho a EFEverde una de las representantes de la Asociación de Moda Sostenible de Barcelona, Eva García.
Los productos de alimentación ecológica certificada representa cerca del 52 % de la oferta de la feria, que incluye alimentos como pastas, arroces, charcutería, comida vegana y repostería.
Además, se puede asistir a un "showcooking, el evento de mayor participación de visitantes", en el que diferentes chefs elaboran en vivo diversas recetas saludables con alimentos bio.
La cosmética certificada es otra apuesta de la feria, con más de 50 expositores y con talleres en los que se explican los beneficios de los ingredientes ecológicos sobre la piel.
Este año, BioCultura espera recibir a más de 80.000 visitantes, en un encuentro con 350 actividades y exposiciones destinadas a la formación de profesionales y consumidores.
El objetivo final de BioCultura, según Ángeles Parra, es que el producto ecológico llegue a toda la población y que todo el mundo tenga el derecho a consumirlo.