Morir en Madrid es todo un lujo, en el peor sentido de la palabra. El precio medio de un entierro sale por más de 4.700 euros, unos 1.200 más que en el resto de España.
Al drama por la perdida de un ser querido, se le suma un desembolso dificil de superar.
Las cremaciones superan el 50 % en la Comunidad de Madrid. El sector funerario espera que dentro de 10 años la cremación sea la opción de seis de cada diez funerales.
La iglesia, que prefiere acepta las incineraciones pero prohíbe dividir las cenizas entre familiares o esparcirlas salvo en lugares santos como el cementerio de la Almudena.
La industria funeraria mueve más de 1.600 millones de euros en nuestro país. En 2015, España batió el récord en número de defunciones, superando los 422.000, un total de 30.000 fallecidos más de la media habitual en el Estado.
La tradición familiar en nuestro país ha hecho que muchas familias hayan contratado durante años un seguro de decesos para estar cubiertos ante lo que pudiera pasar.