Científicos españoles han participado en una investigación que ha logrado obtener células progenitoras de riñón capaces de dividirse indefinidamente en el laboratorio, lo que abre la puerta a la posibilidad de crear riñones trasplantables y a aplicar la terapia celular a órganos cuya función está disminuida. En el hallazgo han participado tres centros españoles (Clínica Cemtro de Madrid, Hospital Clínic de Barcelona y Universidad Católica San Antonio de Murcia), además del Salk Institute de San Diego (California) y la Universidad de Tokai (Japón).