Las ventas de música digital en España, impulsadas por el auge de las plataformas de reproducción en línea, crecerán en los próximos cinco años un 18,7 %, frente a los ingresos de los conciertos que se estancarán, según las estimaciones avanzadas por la consultora internacional PwC.
Este incremento, que supondrá que el consumo digital pase de 74 millones de euros en 2015 hasta los 174 millones de euros en 2020, consolidará la tendencia al alza de toda la industria, también del negocio de la música grabada, que entre 2001 y 2013 sufrió pérdidas ininterrumpidas.
Según el estudio, titulado "Perspectivas del Negocio del Entretenimiento y los Medios 2016-2020. España", el negocio musical del país -contabilizando música grabada y sector en vivo- recaudará dentro de un lustro 518 millones de euros, frente a los 474 millones de 2015, un 1,8 % más, en línea con el mercado internacional, al que se estima un crecimiento del 2,1%.
Estas previsiones mantienen la tendencia positiva de los últimos años. Así, los ingresos de la música grabada en España crecieron un 4 por ciento en el primer semestre de 2016 respecto al mismo período de 2015, encadenando tres años consecutivos de subidas en ese primer tramo del ejercicio.
Será, destaca el informe, gracias al auge del "streaming", que en ese plazo cubrirá el 96 por ciento del sector digital (el cual incluye también descargas y tonos para móvil). Esta parte de la industria crecerá a nivel global mucho menos que en España, un 8,4 por ciento.
La cara amarga la pone, por un lado, el mantenimiento durante el próximo lustro "del desplome del consumo en formato físico", que caerá un 14,7 por ciento, con una reducción de sus ingresos de los 95 millones de euros en 2015 hasta los 43 millones en 2020, según la estimación de la consultora.
El documento también analiza la evolución nacional de la música en directo hasta ese año, que tampoco presenta cifras halagüeñas. Según sus perspectivas, se espera una caída del 0,2 por ciento en los ingresos por entradas y patrocinios.
En el mundo, no obstante, este negocio crecería un 3 por ciento.
Resulta llamativo, señala el estudio, teniendo en cuenta el éxito de algunos macrofestivales, que llevaron en 2015 a que el sector creciera un 12,1 por ciento, cerrando un segundo año de subidas, tras las pérdidas registradas en 2012 y 2013, tras la subida del IVA que se aplica a estos espectáculos del 8 al 21 por ciento.