Cinco millones de conductores, casi un 20 por ciento de los automovilistas, reconocen haberse puesto al volante bajo los efectos de las drogas, un problema en aumento como demuestra que los fallecidos en carretera por consumo de estupefacientes haya crecido un 7 por ciento en cuatro años. Son algunas de las conclusiones del estudio "La influencia de las drogas en los accidentes de tráfico 2012-2015", elaborado por la Fundación Línea Directa, en colaboración con Fesvial, tras analizar 25 millones de controles de drogas y alcohol, y los informes toxicológicos a más de 3.100 conductores y peatones fallecidos.