El 53% de los menores ahogados el año pasado en espacios acuáticos murieron en piscinas, según datos de la Asociación Española de Técnicos en Socorrismo Acuático, que alerta de que en 2017 fallecieron en España ahogados 32 menores, la mayoría chicos y por falta de vigilancia. Más de la mitad de estas muertes ocurrieron en piscinas, un 15% en playas y el 32% restante en puertos, ríos, embalses u otras instalaciones. Hasta en un 58% de los casos la causa fue un descuido en la vigilancia.