El director del Secretariado de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Fuentes, ha asegurado que la encíclica medioambiental del Papa Francisco 'Laudato Si' ha supuesto "un trampolín" para incrementar la sensibilidad ecológica dentro de la Iglesia.
Un ejemplo es la Parroquia Nuestra Señora de las Rosas, en Madrid, donde la conciencia ecológica ha llegado hasta las misas y el funcionamiento de la propia parroquia, con energía renovable y libre de plásticos.
"Ha supuesto un empujón muy fuerte para la sensibilidad ecológica dentro de la Iglesia. Ya venían trabajando ONG como Manos Unidas, pero 'Laudato Si' ha sido un trampolín de salida para muchos, aunque con todo, nos queda un largo recorrido", ha afirmado Fuentes en declaraciones a Europa Press, con motivo de la celebración del 'Seminario sobre ecología integral: agua y energía *Qué futuro?', este sábado 9 de junio en Madrid.
A su juicio, se están haciendo cosas pero es necesario "tomar conciencia ya no tanto de comportamientos como el reciclaje sino de los grandes problemas de la sociedad en este ámbito, sobre todo, con respecto al agua y la energía".
En este sentido, Fuentes explica que hace dos años se plantearon una estrategia para promover iniciativas dentro de la Iglesia que ayudaran a aplicar la encíclica del Papa Francisco sobre el medioambiente 'Laudato Si'.
Así, organizaron un seminario que tuvo lugar en 2017, donde reunieron a 18 diócesis en Madrid y presentaron los proyectos ecológicos que estaban realizando, como el de la parroquia de Las Rosas. Este año han decidido dar un paso más y celebrar un seminario en el que participan 25 expertos del mundo académico, de la política, de la economía, periodistas, organizaciones sociales y de la Iglesia.
Entre las buenas prácticas que se presentaron en el primer seminario celebrado el año pasado, destaca la conocida como "parroquia ecológica de Las Rosas" por su huerto social, sus talleres "de conversión ecológica" o su suministro eléctrico contratado con una cooperativa de energía renovable.
A través de un grupo de sensibilización ecosocial impulsado por tres personas vinculadas a la parroquia, se han puesto en marcha distintas actividades para fomentar la conciencia de cuidado del medio ambiente, desde alternativas al consumo, hasta el proyecto de huerto, en el que actualmente trabajan entre ocho y diez familias, pasando por un itinerario de sensibilización que ha llegado hasta las eucaristías.
En este sentido, han promovido talleres de conversión ecológica, a nivel de actitudes de cambio de comportamiento, que han generado "una cierta conciencia", según precisa Miguel Angel García, uno de los impulsores del grupo de sensibilización. Desde los feligreses hasta el párroco han adoptado la "inquietud" de ir haciendo pequeñas cosas.
"Ya se está planteando, si en un futuro hay una parroquia grande --ahora están en un espacio prefabricado--, tener un lugar que permita, por ejemplo, almacenar vasos de cristal o vasos no de un solo uso, para poder lavar y reutilizar, en lugar de usar vasos de plástico. Esa mentalidad sí se está adquiriendo", ha asegurado.
Entre las experiencias puntuales, también destaca la organización de una carrera solidaria el Día de la Tierra en la que en lugar de entregar una botella de agua a cada participante, sirvieron agua del grifo a los corredores en vasos reutilizables.