Un estudio realizado en cinco países europeos sobre el uso de medicamentos sin prescripción médica revela unos resultados superiores a los esperados, también en España, con el agravante de que los fármacos analizados tienen potencial adictivo.
Uno de los coautores del estudio, José Martínez Raga, psiquiatra del hospital Doctor Peset de Valencia y coordinador de la parte española de la encuesta, ha explicado que se pensaba encontrar tasas más bajas en España que en otros países, por ejemplo en el uso de estimulantes. Lo mismo ha ocurrido con el resto de medicamentos analizados, los opioides y los sedantes.
Así, el estudio revela que en España el 2,4% de la población general ha usado estimulantes sin receta o por encima de la dosis prescrita en el último año (2014), el 6,8% lo ha hecho con los opioides, y el 9,2% con los sedantes.
En los dos últimos casos se trata del porcentaje más alto de los cinco países analizados (Dinamarca, Alemania, Reino Unido, España y Suecia), y en cuanto a los estimulantes el abuso lo lidera el Reino Unido. En el caso de los estimulantes, la tasa de abuso es igual de alta en España que en el resto de países, a pesar de que no tienen tanta presencia en el vademécum.
Uno de ellos, el Rubifen, usado para el TDH (Trastorno de Déficit de Atención por Hiperactividad), puede utilizarse para potenciar algunos aspectos, como la capacidad cognitiva, lo que lleva a utilizarse por estudiantes en época de exámenes y también como una droga.
Según el psiquiatra, en cuanto a los tranquilizantes, España ha tenido tradicionalmente tasas muy altas de uso fuera de la prescripción médica, bien sin receta o por uso del medicamento por encima de la dosis prescrita. "Es un problema latente que pensábamos que tenía que venir y ya está aquí", ha destacado Martínez Raga, que ha alertado de la presencia del consumo de estos medicamentos al menos en un 1% en adolescentes.
El psiquiatra ha manifestado la importancia de la psicoeducación en el colegio y del buen uso de los botiquines familiares, ya que muchas veces se recurre a ellos "con ligereza".
Según ha explicado, se trata del primer estudio de este tipo en Europa después de los que existen en Estados Unidos, donde están teniendo "un problema muy serio" con los opioides y estimulantes. Los resultados evidencian además la alta proporción de personas que está utilizando fármacos fuera de prescripción que también consumen otras sustancias.
El estudio indica que en los países encuestados (5.000 personas en España de distintas edades) el 7% utiliza estimulantes fuera de prescripción médica a lo largo de su vida y un 2,8% lo ha hecho en el último año; el 13,5% ha usado opioides alguna vez y el 5%, en el último año; y en el caso del uso de sedantes, el resultado es del 10,9%, y del 5,8% en el último año.
El proyecto de investigación, publicado hoy en la revista BMC Psychiatry, comenzó hace dos años para conocer los patrones del uso de medicamentos en Europa, con muestras de ciudades grandes y de tamaño medio de los cinco países citados de población general.