Una nueva investigación publicada en 'Plos One' sobre caracoles ha revelado que los altos niveles de estrés pueden bloquear los procesos de memoria. Investigadores de la Universidad de Exeter y la Universidad de Calgary, en Reino Unido y Canadá, respectivamente, encontraron que cuando los caracoles fueron expuestos a múltiples situaciones estresantes no podían recordar lo que habían aprendido.
Esta investigación revela que experimentar múltiples eventos estresantes al mismo tiempo tiene un efecto negativo acumulativo sobre la memoria. "Es muy importante estudiar cómo interactúan las diferentes formas de estrés, ya que es lo que los animales, incluidas las personas, experimentan con frecuencia en la vida real", argumentó la doctora Sarah Dalesman, de la Universidad de Exeter y la Universidad de Calgary.
Los científicos vieron que un solo evento estresante dio como resultado alguna alteración de la memoria y que múltiples eventos estresantes evitaron la formación de cualquier recuerdo. Los comportamientos relacionados con la memoria y las grandes neuronas en el cerebro, útiles al estudiar los procesos de memoria, son fácilmente observables en el caracol de estanque, 'Lymnaea stagnalis', además de ser una especie que responde a los acontecimientos estresantes de una manera similar a los mamíferos, por lo que la hace útil para estudiar el aprendizaje y la memoria.
En este trabajo, los caracoles de estanque fueron entrenados para reducir la frecuencia con la que respiran fuera del agua. Generalmente, estos caracoles respiran bajo el agua y absorben el oxígeno a través de su piel pero en agua con niveles bajos de oxígeno emergen e inhalan aire con un pulmón básico abierto al aire a través de un respiradero.
Se capacitó a los caracoles para no respirar aire cuando se les introdujo en agua poco oxigenada y sus agujeros de respiración se abrían con cuidado cada vez que salían a respirar. La memoria de estos caracoles se analizó mediante la observación de cuántas veces intentaron respirar aire después de haber recibido su formación y el recuerdo se consideró presente si hubo una reducción en el número de veces que se abrieron sus agujeros de respiración. Los investigadores también evaluaron la memoria mediante el control de la actividad neuronal en el cerebro.
Inmediatamente antes del entrenamiento, los caracoles fueron expuestos a dos experiencias estresantes diferentes, bajos niveles de calcio y el hacinamiento de otros caracoles charca. Cuando se enfrentaron a los factores de estrés de forma individual, los caracoles de estanque redujeron su capacidad de formar recuerdos a largo plazo, pero aún así fueron capaces de aprender y formar la memoria a corto y medio plazo que dura desde unos pocos minutos hasta horas, pero cuando se experimentaron ambos factores de estrés al mismo tiempo, se vieron efectos aditivos en la capacidad de los caracoles para formar todos los procesos de aprendizaje y memoria, que se bloquearon.