(Actualizado

Los españoles gastamos mucho más en restaurantes y vacaciones que la media europea. Por contra gastamos mucho menos en alcohol y tabaco que nuestros vecinos. Son las principales conclusiones de un estudio de Eurostat. La mayor parte del presupuesto se destina a vivienda, y eso sí que es común a todos los países.

Si tenemos dinero a los españoles se nos ocurren muchas formas de gastarlo, pero la encuesta europea nos sitúa a la cabeza en el consumo en gastronomía y vacaciones. Por cultura, por costumbre o por lo que sea, se confirma nuestro amor por los bares. Y es que muchos ciudadanos se ven obligados a realizar comidas fuera de casa por las obligaciones laborales, y es frecuente también que se desayune en los bares.

En lo que sí coincidimos con el resto de Europa es que la mayor parte del sueldo se va en gastos de vivienda. Por el contrario España está por debajo de la media europea en consumo de alcohol y tabaco. Es más, somos, los que menos gastamos en bebidas alcohólicas.

LA VIVIENDA SE LLEVA CASI TODO EL SUELDO

El gasto en la vivienda --que incluye la propia renta del hogar, agua, electricidad o gas, entre otros-- representa casi una cuarta parte del gasto total en consumo de las familias de la Unión Europea (UE) (con datos de 2016), según la agencia estadística comunitaria Eurostat.

Se trata, por tanto, del gasto más significativo entre las familias de los Estados miembros, equivalente a 2.400 millones de euros o el 16,4% del Producto Interior Bruto (PIB) de los Veintiocho.

Asimismo, de todas las principales partidas de gasto de los hogares, la vivienda es el elemento que ha registrado el mayor aumento en la última década, desde una participación del 22,7% en el gasto total en 2006 al 24,5% en 2016. "Esta tendencia abrumadora se observa en la mayoría de los países, aunque en diferentes grados", señala Eurostat.

Concretamente, los hogares de Dinamarca, Finlandia y Reino Unido son los que cuentan con un mayor peso del gasto en la vivienda respecto al gasto total, ya que ronda en los tres casos el 30%. Le siguen Francia (26,2%), Suecia (26%) y República Checa (25,6%).

Al otro lado de la balanza, entre los países cuya proporción de gasto en vivienda en relación al gasto total es el más bajo se sitúan Malta (10,3%), Lituania (15,6%), Chipre (15,9%), Estonia (17,6%) y Portugal (18,8%).

Tras el gasto en vivienda, la comida ocupa el segundo puesto al representar el 11,1% del gasto total de las familias en la UE. A continuación, le sigue el gasto en bares, restaurantes o 'pubs', con un 6,9% del gasto total. Al lado opuesto, el gasto en hoteles, hostales u otros servicios de alojamiento equivale al 1,7% del gasto.

ESPAÑA, POR DEBAJO DE LA MEDIA EUROPEA

En el caso de España, el gasto de las familias destinado a la vivienda se sitúa en el 22,3%, lo que supone 2,2 puntos porcentuales por debajo de la media europea, aunque se coloca también como el gasto de más importancia de las familias. Así, se sitúa justo por debajo de Austria (22,4) y por encima de Letonia (21,2%).

No obstante, las familias españolas se consolidan como las que más gastan entre todos los Estados miembros en bares, restaurantes, 'pubs' o cafeterías, un 14,8% del gasto total y el segundo gasto más importante de los españoles. Seguido de España en esta partida se sitúan Irlanda (13,2%), Malta (12%) y Grecia (11,5%).

Asimismo, España se afianza por encima de la media europea en el gasto en alimentación, que representa el 11,7% del total, y en el gasto en comunicaciones, teléfono o servicios de Internet (2,6%). Del mismo modo, los servicios de salud y seguros, y el gasto en hoteles u otros servicios de alojamiento, ocupan las partidas a las que menos gasto dedican los españoles (ambas un 1,5%).