Cinco monitores de nacionalidad alemana han sido detenidos, acusados de un delito contra el orden público, tras protagonizar anoche una broma en forma de "flashmob" en Castell-Platja d'Aro (Girona) que desató el pánico entre los vecinos y turistas de la localidad, y que causó once heridos leves.
Según han informado los Mossos d'Esquadra, los cinco detenidos formaban parte de un grupo de jóvenes que simularon que dos famosos eran perseguidos por un grupo de 'paparazzis' y fans, en pleno centro de la localidad, donde a esa hora había numerosas personas que frecuentaban terrazas o tiendas aún abiertas al público.
La broma fue mal interpretada por muchos ciudadanos, que relacionaron las carreras con una amenaza terrorista, y se produjo una estampida de gente corriendo por las calles mientras se propagaba el rumor de que se estaban produciendo disparos.
La Policía de la Generalitat ha informado que, a consecuencia de las carreras y de las caídas de las personas que huían, ocho personas tuvieron que ser atendidas en el Centro de Asistencia Primaria (CAP) de Platja d'Aro, seis por contusiones leves y dos por ataques de ansiedad, mientras otras tres fueron derivadas al hospital de Palamós, también por contusiones leves.
Tanto la Policía Local de Castell-Platja d'Aro como los Mossos d'Esquadra tuvieron que hacer llamadas a la calma de los ciudadanos, aclarando que se trataba "únicamente de un flashmob" e invitando a evitar la propagación de rumores falsos, que se habían desatado a través de las redes sociales.
Finalmente, cinco monitores alemanes responsables de la broma quedaron detenidos y pasarán hoy a disposición del juzgado de Sant Feliu de Guíxols acusados de un delito contra el orden público.