Los chinos compraron el 46 % de los productos de lujo del mundo en 2015, el 78 % de ellos adquiridos fuera de su país, según un informe de la consultora especializada en el mercado de alta gama Fortune Character citado hoy por el diario oficial chino Global Times.
Este estudio -basado en datos de ingresos de 20.000 marcas de lujo- afirma que los chinos se gastaron 116.800 millones de dólares en productos de lujo el pasado año, lo que representa un aumento de un 9,25 % respecto a los 106.000 millones que pagaron en 2014.
La mayoría de esas compras de productos de lujo, unos 91.000 millones de dólares (78 % del total), se realizaron fuera del gigante asiático, un dato que confirma que los turistas chinos son los que más gastan en el exterior.
El informe asegura que los chinos prefieren comprar productos de lujo fuera de su país porque son más baratos: un alcohol o un reloj de alta gama puede ser un 80 % más barato si lo compran fuera de China, según Fortune Character.
Las compras de alta gama de chinos en el exterior aumentaron un 12,35 %, mientras que dentro de su país, su gasto en lujo se incrementó un 3,2 % en 2015 respecto a 2014 para ascender a 25.800 millones de dólares.
Así, sólo un 22 % de las adquisiciones de productos de alta gama efectuadas por los ciudadanos del gigante asiático se realizan dentro de su país.
Esta distribución de las ventas se ha visto afectada por la campaña anticorrupción del presidente chino, Xi Jinping, que ha tenido entre sus medidas más publicitadas la petición de que no se vea a altos funcionarios del Partido Comunista con ropa o artículos de lujo, o consumiendo bebidas alcohólicas o comidas caras.
Los datos del informe de Fortune Character contrastan con los de otras firmas de consultoría como Bain&Company, que recientemente publicó un estudio sobre el mercado del lujo en China que mostró una contracción en las ventas sector de un 2 % el año pasado en comparación con 2015.
Bain&Company atribuyó este descenso, que sigue con la tendencia descendente que se inició en 2013, a la ralentización de la economía china, la campaña anticorrupción y el aumento de las compras fuera del país.