United Airlines pidió este domingo en su vuelo 3411, que debía cubrir la ruta desde el aeropuerto Internacional O'Hare de Chicago hasta Lousville (Kentucky), cuatro voluntarios para abandonar la aeronave a cambio de una compensación económica y poder así trasladar a cuatro de sus tripulantes, lo que acabó con un hombre sacado a la fuerza del avión por agentes de seguridad.