El Rey ha deseado a los conductores que regresan de sus vacaciones un feliz retorno y ha agradecido a las patrullas de la Guardia Civil su "buen hacer" en beneficio de un inmenso número de familias españolas, poniendo incluso sus vidas en juego.
Por primera vez desde su proclamación, Felipe VI ha visitado las dependencias de la Dirección General de Tráfico (DGT), justo el día en el que finaliza la operación especial de Semana Santa y el tráfico es intenso en muchas carreteras del país.
Don Felipe ha tenido ocasión de desear a esos conductores que finalizan hoy su descanso un viaje sin incidencias, y lo ha hecho activando poco después de las 14.15 horas un panel informativo con la leyenda: "Operación tráfico de Semana Santa. Buen viaje de retorno".
Poco después, se ha dirigido por la emisora a todas las patrullas de la Guardia Civil y a los helicópteros de la DGT para expresarles su "reconocimiento y afecto", y el de todos los españoles, a los hombres y mujeres de la Guardia Civil que están en servicio en todas las carreteras del país y en los medios aéreos, sobre todo en un día como hoy cuando acaba la operación especial de tráfico.
Ha agradecido su trabajo, especialmente -les ha dicho- sabiendo que en muchas ocasiones ponen su propia vida en riesgo.
Gracias a esa labor, ha asegurado el Rey en su mensaje, muchos millones de españoles se sienten bien atendidos y más seguros. "Que tengáis un buen servicio y volváis a la base sin novedad", ha deseado el monarca a los alrededor de 10.000 efectivos que componen la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
La anécdota de la jornada se ha producido poco antes de concluir la visita, cuando el Rey, al ser preguntado, ha reconocido que hace años le pusieron una multa.
Antes de visitar el Centro de Gestión de Tráfico, donde ha podido visionar en las pantallas el desarrollo de la operación retorno, ha mantenido una reunión de una hora y cuarto con los responsables de la DGT, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz; el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y la máxima responsable de Tráfico, María Seguí.
En ese encuentro, el monarca ha conocido de primera mano el dispositivo de Semana Santa, un periodo en el que se han movilizado todos los efectivos disponibles para garantizar la seguridad y la fluidez en las carreteras.
Según los datos que Tráfico ha expuesto en su centro de pantallas, se han producido en estos diez días 13,9 millones de desplazamientos, un 7,8 por ciento más que un año antes, favorecidos en parte por la favorable meteorología y la bajada de los carburantes.
Además, le han informado de los datos de la siniestralidad en estas vacaciones. Hasta las doce de la noche de ayer, el número de personas que han perdido la vida en accidente de circulación era de 25, aunque la operación concluirá esta medianoche. En la Semana Santa de 2014 los fallecidos fueron 37.
Tras el mensaje a las patrullas, Felipe VI ha compartido un cóctel con trabajadores de la sede de la Dirección General de Tráfico, donde prestan su servicio unas 400 personas. Su padre, el rey Juan Carlos, visitó estas mismas instalaciones el 30 de agosto de 2012, también en plena operación retorno, en esta ocasión de las vacaciones de verano, que concluían al día siguiente para muchos conductores.
