Iberdrola, Endesa y Naturgy, las empresas propietarias de la central nuclear de Almaraz (Cáceres), han acordado solicitar formalmente al Ministerio para la Transición Ecológica una 'miniprórroga' para los dos grupos de la instalación extremeña hasta junio de 2030.
En un comunicado remitido este jueves tras su asamblea extraordinaria, la sociedad Centrales Nucleares Almaraz-Trillo (CNAT) reitera su compromiso para seguir operando Almaraz de forma "segura, fiable y eficiente, manteniendo los altos estándares que la sitúan entre las mejores centrales del mundo".
De obtener el visto bueno, la prórroga supondría ampliar en tres años la vida útil del primer reactor de Almaraz, cuyo cese de actividad está previsto para el 1 de noviembre de 2027, y en dos años la de la segunda unidad, que, de acuerdo con el calendario actual, tendría que echar el cierre el 31 de octubre de 2028.
En una breve nota, CNAT se refiere a esta central como una "infraestructura esencial que suministra más del 7% de la electricidad consumida en España, cifra equivalente a 4 millones de hogares".
Al mismo tiempo, señala, la instalación es el "principal motor socioeconómico de su entorno y una de las mayores industrias de Extremadura, generando puestos de trabajo de alta cualificación y larga duración, además de tener un efecto tractor sobre otras industrias".
CNAT, que agrupa a las compañías titulares de Almaraz, sostiene además que la planta cacereña "cumple con todos los requisitos" de la revisión periódica de seguridad aprobada por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en 2020 y que está vigente, precisamente, hasta 2030.
Ahora el Ministerio para la Transición Ecológica trasladará la petición al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para que el regulador pueda valorar la solicitud y emitir su preceptivo informe.
La vicepresidenta tercera y ministra del ramo, Sara Aagesen, recordaba desde Jaén la posición del Gobierno: que haya seguridad para las personas, que se garantice la seguridad de suministro y que no suponga un mayor coste para los ciudadanos.
No todo el Gobierno opina igual. La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ya advirtió a su socio de Gobierno, el PSOE, que de optar por extender la vida útil de las centrales nucleares de nuestro país, se estaría "vulnerando" el acuerdo de Gobierno.
Para 2030 y 2032, respectivamente, esta previsto el cierre de las dos fases de la central nuclear de Ascó (Tarragona).
Conocida la noticia, la plataforma 'Sí a Almaraz, sí al futuro' ha instado al Gobierno central a que apueste, "de una vez por todas", por ampliar la actividad de esta planta. "La vida de la central nos da vida a los vecinos", ha afirmado. A tenor de los datos de CNAT, unas 4.000 personas trabajan "en y para" esta instalación en su zona de influencia.
De obtener el visto bueno, la prórroga supondría ampliar en tres años la vida útil del primer reactor de la central cacereña, cuyo cese de actividad está previsto para el 1 de noviembre de 2027, y en dos años la de la segunda unidad, que, de acuerdo con el calendario actual, tendría que echar el cierre el 31 de octubre de 2028.