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Los costes derivados de las catástrofes naturales ocurridas en España ascendieron a 2.891 millones de euros durante el año pasado, de los que 1.496 millones estaban asegurados.

Así se desprende del Barómetro de Catástrofes 2022, elaborado por la Fundación Aon España y presentado este jueves en el Instituto de la Ingeniería de España durante el VIII Simposium del Observatorio de Catástrofes, en Madrid.

Los 1.496 millones pagados en indemnizaciones aseguradas por estos fenómenos extremos fueron un 35% inferiores a los importes abonados en 2021 (2.300 millones de euros), año en el que ocurrieron la borrasca Filomena y la erupción del volcán de La Palma.

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Por otro lado, el Barómetro incluye el análisis de los mayores 10 acontecimientos catastróficos naturales en España. Destaca la helada que se prolongó durante seis días de abril en Albacete, Alicante, Huesca, Lleida, Murcia, Valencia y Zaragoza, con 221,2 millones de euros en costes asegurados (36,9 millones por día).

El segundo resultó ser la sequía en herbáceos que se prolongó durante todo el año en Burgos, Cuenca, Lleida, Palencia, Sevilla, Soria, Valladolid y Zamora, con 92,2 millones de euros asegurados (0,3 millones diarios).

El pedrisco estival ocupa el tercer lugar de sucesos catastróficos más costosos. Se produjo durante 90 días con 61,7 millones de euros asegurados en Albacete, Huesca, Valencia y Zaragoza.

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EMERGENCIAS

El coste imputado a las actuaciones de emergencias (Protección Civil, Unidad Militar de Emergencias y Cruz Roja Española) supuso 166 millones de euros y el impacto sobre el PIB se elevó a 1.225 millones (420 millones de impacto directo en empresas sin seguro, 542 millones de impacto indirecto en empresas y 263 millones por pérdida de rentas empresariales y salariales).

El coste asegurado el año pasado por inclemencias meteorológicas fue el tercero más alto de la serie histórica del Barómetro, con un 12% por encima de la media entre 2016 y 2022.

Más de la mitad de los daños asegurados resultaron cubiertos por Agroseguro, mientras que un 33% corrieron a cargo de seguros privados y un 7% por el Consorcio de Compensación de Seguros.

Las heladas (39%), el pedrisco (21%) y la sequía (16%) fueron los fenómenos más dañinos para la agricultura española durante el año pasado, sobre todo en cultivos de Cataluña, Aragón y Murcia.

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Por su parte, las inundaciones causaron el 94% de los daños asegurados y se vieron afectados, sobre todo viviendas (42%) y comercios (30) en las provincias de Valencia, Tarragona y Badajoz.

En 2022 hubo más de 316.000 hectáreas quemadas por incendios forestales, una cifra solo superada en 1978, 1985, 1989 y 1994 durante los últimos 55 años.

En términos de coste humano, el año pasado murieron 45 personas por catástrofes naturales en España, una cifra inferior a la media registrada desde el comienzo de este siglo (49 víctimas mortales), con las olas de calor como primera causa.

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Más de un tercio de los daños asegurados (618 millones de euros) se produjeron en abril, cuando hubo heladas fuertes y tardías, muy perjudiciales para los cultivos del tercio este peninsular, principalmente Lleida y Huesca.

Aragón fue la comunidad autónoma con más daños en relación a su población (77 euros por habitante), por delante de Murcia (66) y Extremadura (40).

Las tres regiones del Mediterráneo oriental peninsular (Murcia, Comunidad Valenciana y Cataluña) concentran un coste asegurado por kilómetro cuadrado más elevado que el resto. En Murcia, por ejemplo, se abonaron casi 9.000 euros por kilómetro cuadrado.

Por último, las empresas españolas dejaron de facturar alrededor de 2.660 millones de euros en 2022 por sucesos catastróficos, una cifra inferior a los 3.213 millones de 2021.

Su impacto provocó una contracción de 1.225 millones de euros en el PIB y la pérdida de 25.200 empleos. El sector más afectado fue la agricultura y la pesca, por delante del comercio, la industria agroalimentaria y el sector inmobiliario.