Funcionarios de la Agencia Tributaria han incautado un total de 2.992 kilos de hachís distribuidos en 92 fardos hallados ocultos en el interior de un doble fondo de una embarcación que tenía como destino un puerto deportivo de la costa malagueña.
La intervención se ha realizado en el marco de la operación 'Marduk-Bachus' contra el tráfico ilegal de sustancias estupefacientes en la que se han detenido a siete personas --seis hombres y una mujer de nacionalidad británica, española y alemana--, integrantes de una organización que se dedicaba a importar hachís desde Marruecos y Gibraltar hasta España para su posterior distribución.
Barcas 'caleteadas'
Según ha informado la Agencia Tributaria en un comunicado, la red disponía de varias embarcaciones 'caleteadas' que utilizaban para introducir la droga a puertos deportivos de la costa malagueña desde donde posteriormente era distribuida.
La investigación, en la que se ha contado con la colaboración de agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, se inició cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una organización criminal asentada en Marbella dedicada al narcotráfico. La red, liderada por una mujer de nacionalidad española y su socio de nacionalidad alemana, se dedicaba al tráfico de estupefacientes por vía marítima utilizando para ello navíos de recreo.
Desde Gibraltar y Marruecos
Las pesquisas practicadas permitieron a los investigadores identificar a los principales integrantes de la organización y a varios de sus miembros de nacionalidad española y británica. Además, averiguaron que el 'modus operandi' consistía en fletar embarcaciones de recreo 'caleteadas' para transportar hachís desde Gibraltar y Marruecos hasta nuestro país a través de puertos deportivos de la costa de Málaga. Estupefaciente que posteriormente distribuían en el mercado negro.
Dinero, móviles, coches y drones
Además, los investigadores constataron que la organización, para ocultar la verdadera propiedad de las embarcaciones, utilizaba 'sociedades pantalla'. Los cabecillas de la red, perfectamente organizada y con claro reparto de tareas, organizaban y disponían todas las tareas del grupo, desde los cargamentos en alta mar hasta los transportes de la droga y su posterior distribución.
En el transcurso de la operación, se detectó en alta mar una embarcación cuando cargaba droga desde una lancha. Tras una minuciosa inspección del barco se incautaron 92 fardos de hachís que arrojaron un peso de 2.992 kilos y detuvieron a los tres tripulantes.
Continuando con la investigación se practicaron varios registros donde los agentes han intervenido 633.335 euros y 24.125 libras esterlinas, además de 30 teléfonos móviles, cuatro vehículos, una motocicleta, una embarcación y un dron.