'Si no es divertido, no es sostenible' es el lema de los talleres medioambientales que pretenden dar a conocer el Parque de El Humedal de Coslada, que cuentan con medio centenar de participantes cada fin de semana, entre niños y adultos.
Un paseo ornitológico, la construcción de cajas nido, la elaboración de un banco de semillas o de ropa a partir de plantas naturales son algunas de las actividades desarrolladas en el Naturalario, el aula que acoge El Humedal, cuya superficie ocupa 70 hectáreas y está situado en los límites de localidad madrileña.
"Lo singular del espacio es que es un parque urbano, pero con una estructura de bosque, y eso, junto con su gran extensión, lo convierte en un refugio de aves interesantes", señala Beatriz Escudero, la experta pajarera del Naturalario.
Bajo una ruta trazada por Escudero, puede recorrerse el parque cada fin de semana y regresar a casa a la ciudad con la sensación de haber visitado un pequeño paraíso.
"Durante el paseo, los participantes, sean niños o adultos, aprender a mirar y a sentir en medio de la naturaleza, y dejan atrás esa inercia con que nos movemos por la ciudad, sin fijarnos en lo que tenemos alrededor", sostiene la educadura medioambiental en una entrevista con Efe.
Para disfrutar de las sorpresas de la ruta, de observar pequeñas aves como verdecillos o abuvillas o rapaces como milanos, se entrega a los excursionistas unos prismáticos, así como una guía.
El paseo para conocer el parque finaliza con la participación en un taller para aprender a construir cajas nido y comederos a partir del reciclaje de materiales como un brik de leche.
Otras actividades pensadas para el público familiar puestas en marcha por la asociación En Clave a instancias de la Concejalía de Medio Ambiente de Coslada, tienen que ver con el cuidado de la alimentación.
'Combate de Ensaladas (la agroecológica frente a la convencional)' es otra de las novedades de la programación del Naturalario que mejor respuesta han cosechado por parte de escolares, jóvenes y jubilados.